Después de casi diez años de ausencia, la mayor reunión motera de Francia – e incluso de Europa, me atrevería a decir – parece que prepara su regreso para deleite de sus seguidores.
Además de un acontecimiento importante dentro del mundo del motociclismo, el Free Wheels es también un festival de rock que ha logrado a lo largo de sus 14 ediciones situarse como uno de los cinco principales festivales franceses.
Organizado desde 1987 por Hells Angels, el evento – que fue hace años lugar de peregrinación para todos los moteros custom y Harley – ha ido ocupando un lugar en los anales de la leyenda motera.
En agosto de 2001 (la última edición), asistieron más de 20.000 personas de toda Europa para compartir su pasión y vivir intensamente estos tres días de fiesta, espectáculos, conciertos, y custom, en un espacio cerrado para los asistentes. Motos Harley Davidson de ensueño, japonesas customizadas, motos inglesas, clásicas customizadas, convivieron siempre bajo un mismo cielo y una misma fiesta que jamás se ha visto superada.
Más de 150 stands, una docena de bares y restaurantes, conciertos, una exposición de motos galardonados, … la elección de Miss Free Wheels, etc. Una edición la del 2001 que fue la última (aunque no la mejor).
Este año (tras diez años de ausencia), el Free Wheels se instala y se trasladó a Courpière en el Puy-de-Dome. A cincuenta kilómetros de Clermont-Ferrand, en el centro del parque Livradois Forez; Courpière es una ciudad amurallada medieval construida sobre una terraza fluvial con vistas a la desembocadura de los barrancos de la Dore. Bien protegido por el castillo y con un rico patrimonio medieval muy bien conservada, la ciudad tiene un encanto áspero y genuino que será un escenario natural de este gran “nuevo” Free Wheels.
¿Logrará cumplir las expectativas? Nosotros no lo creemos, en la última edición en la que estuvimos (año 2000) no se respiraba el mismo ambiente, el custom era otra cosa, algo más que una pose, un estilo de vida, un sentimiento, … eran “aquellos maravillosos años“.
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